-
Ansiedad: sentimientos constantes de nerviosismo o preocupación , palpitaciones, sudoración o temblores , evitación de situaciones que pueden causar ansiedad, sensaciones de agobio o dificultad para concentrarse.
-
Depresión: sentimientos persistentes de tristeza o desesperanza, falta de interés en actividades que antes se disfrutaban cambios en el apetito o el sueño, pensamientos recurrentes de muerte o suicidio.
-
Dependencia emocional: necesidad constante de aprobación o validación de otros, dificultad para tomar decisiones sin consultar a una persona específica, sentimiento de vacío o desesperación cuando se está solo, relaciones que sienten desequilibradas o unilaterales.
-
Duelos y rupturas: dificultad persistente para aceptar la pérdida o el cambio ,sentimientos intensos de tristeza, ira o culpa relacionados con la pérdida, retraimiento social o aislamiento, pensamientos obsesivos sobre la persona o situación perdida.
-
Ataques de pánico: episodios súbitos de miedo intenso con síntomas físicos (palpitaciones, sudoración, temblores), miedo a tener otro ataque, evitación de lugares o situaciones asociadas con ataques previos.
-
Estrés: sensación constante de estar abrumado, dificultad para relajarse o desconectar , síntomas físicos como dolores de cabeza o tensión muscular, irritabilidad o cambios de humor.
-
Trastornos del sueño: dificultad para conciliar o mantener el sueño, sentirse constantemente cansado durante el día, pesadillas o terrores nocturnos, problemas de concentración o memoria debido a la falta de sueño.
-
TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo): pensamientos intrusivos y repetitivos que causan ansiedad, comportamientos o rituales repetitivos realizados para aliviar la ansiedad, reconocimiento de que los pensamientos o comportamientos son excesivos.
-
TCA (Trastornos de la Conducta Alimentaria): preocupación obsesiva por el peso o la figura, comportamientos alimenticios extremos (restricción, atracones, purgas), sentimientos de culpa o vergüenza después de comer, cambios drásticos en el peso
-
Acoso laboral o mobbing: sentimiento constante de ser hostigado o marginado en el trabajo, miedo o ansiedad al pensar en ir al trabajo, disminución del rendimiento laboral o la autoestima, síntomas físicos o psicológicos relacionados con el trabajo.
-
Fobias: miedo intenso y específico hacia un objeto o situación, evitación activa de la fuente del miedo, conciencia de que el miedo es desproporcionado.
-
Problemas sexuales: dificultad o incapacidad para alcanzar la satisfacción sexual, ansiedad o miedo asociado con la actividad sexual, dolor o malestar durante el acto sexual, evitación del contacto íntimo.
- Violencia de género: miedo y ansiedad constantes, inseguridad, aislamiento social, cambios en el apetito y sueño, autolesiones, depresión